Pienso que no hay tesoros debajo de este planoy si hay un dios se hospeda en los rincones.Qué terrible esto de ser brasa de humanotan hecho de papel que el […]
Ver Ahora bien, que estoy solo.Que ya tus ojos se han ido y descansan.Es profundo el misterio y su ríodonde uno quiere ahondar y nada.Ahora viene el primer desvarío.Le seguirá una […]
Ver “And the stars never rise,but I feel the bright eyes”Edgar Allan Poe IDesde la plutónica historia del amor,venida del celoso umbral celeste,abrazo del primer océano y del éter,ha llegado en […]
VerCuando yo diga día no pienses en la luzni en la rutina, ni en el calor, la fotosíntesis o la abadía.Cuando yo diga día entiende el sinsaborde una mañana que […]
Ver Vienen pasando lentas de lunacon sus reflejos cautivos,con sus hojas de arena, mudas,pronunciando en la noche rocíos.El vaso derramado, cristal que inundael cuarto, la mesa, las velas, los libros.Y es […]
VerSi me decís –Hola- contesto tomándote de las manos. Si me decís una mirada, buscame bajo tu cuello. Si me decís -Chau- das encendido a un sonámbulo. Si me decís […]
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En Noctámbulo, Lufso nos introduce a un viaje oscuro y poético a través de la noche, donde las emociones se entrelazan con imágenes oníricas y seres míticos. Este libro nos […]
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En Acuarelas, nos sumergimos en un viaje poético donde el amor, la pérdida y la nostalgia se entrelazan con imágenes de una belleza arrebatadora. A través de versos que evocan […]
Ver¡Qué mezquina es la tierra en otoño! ¡Qué avariciosa es su hambre por las hojas! Que no ha dejado un hueco crudo para mis versos sumergidos en congojas. Yo los […]
Ver¿Cuánto tarda uno en caer al delirio? Si es por desatino o desvarío tarda, tanto; Tanto como un giro, como una media vuelta, asustado sin ser visto y visto asustándose. […]
VerHe perdido las albas de tanto dormirme al final de las horas soñando tus manos junto a las mías en la soledad del mundo. Las mañanas me recuerdan a dos […]
VerNos recuerdo a los dos pequeños de todo lo que consuma la vida. ¿Niña, quieres jugar conmigo? y tus ojos asentaban felicidad. De risa era la corona que te cubría […]
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