Llueve. Calor. Humedad. Bichos por todos lados. La tierra se va ahogando de todo lo que se chorreó el cielo. ¿Será posible que desde lo subterráneo expriman a estas cosas? Mitad pálidas, mitad pardas. La tierra como un gran pintor oprime los pomos de estas formas animadas. Similares a unas lenguas… si… a las lenguas de la tierra. Yo sé que salen a saborear el exterior, yo sé que van tanteando el panorama, que se arrastran pintando con su sangre el trayecto de su raza. Van a venir de a miles, millones, con su forma no esmerada, con su desesperación de movimiento. ¡Son tan terroríficas en las pisadas! Como pequeños mercurios algún día se van a juntar, van a dejar de ser las mínimas babas animadas, se van a convertir en una capa asquerosa del tamaño de la ciudad, y con su lentitud precisa van a asfixiar… por haber odiado tantas veces con sal.
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